La Transición De La Muerte

LA TRANSICIÓN DE LA MUERTE

“Mediante su investigación, su inteligencia se magnifica y su moral se purifica. A las necesidades del cuerpo siguen a las del espíritu: tras el alimento material, se necesita el alimento espiritual. Así es como el hombre pasa del salvajismo a la civilización.”

(El Evangelio según el Espiritismo, Cap. XXV, ítem 2.)

“¿Cómo es que vuestro Maestro come con publicanos y gente de mal carácter? – Al oírlos, Jesús les dijo: No son los que están sanos los que necesitan médicos.» (Mt 9, 11 y 12).

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Bajo los cielos, todo lo que nace está destinado a la transición a la cual llamamos muerte.

La muerte de cualquier organismo corresponde a una transformación que no se puede detener.

En el cuerpo rígido de las montañas todo cambia, se produce la muerte, se deshacen ciertas relaciones atómicas y surgen otras que modifican estructural o esencialmente la sustancia anterior.

Pocos llegarían a pensar que el poderoso petróleo de hoy nació de los restos mortales de los animales y de las plantas, sometidos a las presiones y a las temperaturas del subsuelo.

Hay quien dude de que el valioso diamante, sea la resurrección del carbono fallecido bajo los milenios de sepultura en las profundidades planetarias.

La mariposa es la victoriosa estrella colorida que surgió de la crisálida deshecha.

La perla es la coronación de la vida tras la muerte del molusco agredido por el cuerpo invasor.

Es también a partir de la muerte del cuerpo biológico del ser humano que aparece el ser inmortal, el ser “siempre-vivo” que, feliz o infeliz, sutil o sombríamente, seguirá existiendo, en la lucha por superarse, conquistando niveles superiores de vida, ya que morir es transformarse a partir del estadio en que se encuentra el ser “muerto”.

Trata bien tu vida: cuida tu cuerpo sin neurosis; actúa con fraternidad hacia el prójimo; aprende a ser fiel a tus sentimientos evitando la molesta hipocresía; procura no almacenar culpas en los graneros de tu conciencia, reparando o haciendo las paces con quien lo necesite, y así sucesivamente.

Aprende a amarte a ti mismo hasta el punto de vivir tan bien que, cuando llegue el momento de la gran transformación impuesta por la muerte, te encuentres bien, con la conciencia verdaderamente tranquila y en condiciones de elevarte a los cielos más altos, sin ningún apego a lo que ha quedado en el mundo, y sin ningún tormento frente a los seres queridos que tendrán que seguir sus propios caminos de liberación.

Benedita Maria – Espíritu.

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Cap. XI – Acerca de los Aprendizajes en el camino del crecimiento –. Acerca de los Aprendizajes en el camino del crecimiento. 60. LA TRANSICIÓN DE LA MUERTE. Extraído del libro: “Acciones valientes para vivir en paz”; por el Espíritu de Benedita Maria. Psicografía de José Raúl Teixeira.

Imagen principal: Mindworld.